Tras un divorcio, las relaciones entre padres e hijos mayores de edad no son siempre fáciles y, en ocasiones, pueden llegar a ser inexistentes. Algunos padres se plantean si esta circunstancia puede extinguir la pensión de alimentos en favor de los hijos, quienes además de no tener relación con su padre en ocasiones ni estudian ni trabajan.
Los artículos 152.3 y 152.5 del Código Civil, prescriben que si la falta de ingresos del hijo proviene de "una mala conducta o falta de aplicación al trabajo", se podría revisar esa ayuda, ya que el hijo no está mostrando ningún interés por formarse o acceder al mercado laboral. Pero hay una reciente STS 104/2019, de 19 de febrero de 2019, en la que deja la puerta abierta a la posibilidad de extinguir la pensión de alimentos que aquellos hijos mayores de edad que no mantengan ningún tipo de relación con el progenitor obligado al pago de su pensión de alimentos.
La Sala de lo Civil del T.S. se pronuncia sobre una cuestión que no se había pronunciado hasta la fecha y que deja sentados los criterios para que en el futuro pueda acordarse la extinción de la pensión de alimentos en aquellos casos en que los hijos, siendo ya mayores de edad, se niegan a relacionarse con su padre.
Estos criterios, sólo son de aplicación en dos supuestos:
a) Los hijos son mayores de edad.
b) Los hijos se niegan a relacionarse con el progenitor obligado al pago de la pensión de alimentos.
Es decir, no opera en otras causas en las que la falta de relación, no sea consecuencia de la negativa del hijo a mantener esa relación. Por tanto, será indispensable probar la falta de relación entre padre e hijo; que esa falta de relación sea relevante y persistente en el tiempo, no basta un enfado puntual; y, que sea principalmente imputable al hijo a quien se pretende suprimir la pensión.
No va a ser fácil acreditar a quien es imputable esa falta de relación e, intentar probarlo puede ser un motivo para destapar discordias familiares, pero es imprescindible para que la acción pueda prosperar.